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Vinófilos.- Lavinia Cardoso es una sumiller que a pesar de su juventud cuenta ya con una trayectoria reseñable en el servicio de sala en Canarias. El desarrollo de su labor en diversos negocios de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria no ha pasado desapercibido para nadie y esto unido a su interés e inquietud profesional le convierten en un miembro activo a tener muy en cuenta en el sector.

Actualmente es sumiller en el Restaurante Ribera del Río Miño de la capital grancanaria y ante nuestro ofrecimiento de colaboración para incluir un artículo suyo en este blog, no dudó ni un momento en escribir un interesante post acerca de los desconocidos y atractivos vinos de su tierra natal: Cabo Verde.

La sumiller Lavinia Cardoso

La isla de Fogo es una de las 10 islas que componen el Archipiélago de Cabo Verde. Las islas fueron descubiertas en 1400, pero no fue hasta 1460 cuando se descubre Fogo por el capitán genovés Antonio de Noli. Fue bautizada inicialmente como Sao Filipe (nombre de la actual capital de la isla) hasta que la erupción de proporciones devastadoras cambió el actual nombre. La historia de Fogo va asociada al ritmo caprichoso del volcán que va modificando el paisaje con sus erupciones. Actualmente tiene una densidad de población de 37.071 habitantes con una superficie de 473 km. La ultima erupción fue en 2014 y destruyó parte de las vides y del poblado.

En todo el archipiélago es la única isla donde se produce vino. Con un suelo volcánico, ‘Picón’, las cepas están plantadas en la zona de Chá das Caldeiras a 1700 m de altitud, pero están orientadas sobre todo en laderas y montañas a unos 1500 m. sobre el nivel del mar. La tipología del suelo le aporta al vino cuerpo y aromas minerales.

El clima de la isla es bastante caluroso, con temperatura media de 20-25 ºC, y muy húmedo. Es la isla que más precipitaciones registra, de modo que por las noches se llegan a producir heladas y en cambio por el día mucho calor.

Las variedades encontradas en la isla son casi todas traídas por los colonos portugueses, de ahí que de entre ellas casi todas son de la región, y muchas no se han podido analizar y catalogar. Entre todas las analizadas nos encontramos con las siguientes variedades:

  • Verdello
  • Sabro
  • Castelao
  • Baboso Negro
  • Listan Blanco
  • Negra Dorada
  • Moscatel Negra
  • Tinta (bastardo)
  • Dona María
  • Cardianal
  • Moscatel de grano menudo
  • Barbera Negra
  • Sultanía
  • Alfonsé Lavaleé

Tipos de vinos

Con estas variedades se elaboran vinos blancos, rosé, tintos, ‘passito’ (dulce), ‘manecon’ (lo que aquí llamamos abocado) y algunos licores.

Estos vinos suelen ser de una elevada graduación alcohólica, siendo la más baja encontrada de 14,7%, con un pH alto sobre todo en los tintos dando lugar a una baja acidez. Los productores de vino de la zona a menudo se encuentran con un problema: La conservación del vino. Y una de las razones es el alto contenido de nitrógeno amoniacal. En cuanto al color el contenido poli fenólico se caracteriza por altos contenidos antocianos con una gran polimeralización, lo cual incide en la poca presencia de fenómenos de pigmentación.

Los vinos blancos de fogo son en general de gran complejidad y una elevada graduación alcohólica en parte debido a su tardía recogida, que de hecho se hace a mano por su orografía montañosa, y a la falta de infraestructura para su recolecta y conservación. A la vista son limpios y brillantes con una tonalidad amarillo verdosa. El aroma tiene como carácter general a frutas tipo piña o lima, con notas herbáceas y anisados. En boca resulta ligeramente untuoso y de gran expresividad.

Los tintos, también siguen la misma pauta que el blanco en cuanto a la graduación alcohólica, pero son más astringentes y ásperos debido fundamentalmente a la variedad utilizada, Preto, y por su vendimia tardía. En boca resulta más seco, pero con una elevada carga de aromas primarios asociados a los frutos del bosque y las bayas rojas.

Los rosados, son frescos, bastante equilibrados y a la vista destacan por su oxidación de la tonalidad.

El vino Passito-Dulce, se elabora con la variedad Moscatel mediante la pasificación, de ahí el nombre. A la vista un color dorado brillante, en boca buena acidez con notas de caramelo y miel.

El vino Manecon-Tinto, puede ser tanto dulce como seco, su producción es mayormente casero y se vende a granel, con un color rojo picota muy morado y en boca con mucho cuerpo.

Las bodegas de la isla

  • Bodega Cooperativa Sodade

Es una cooperativa de 18 miembros que empezó en 2007, las primeras botellas salen al mercado en 2008. Eduino Lopés es el presidente de la cooperativa de viticultores de Achada Grande, Relva y Corvo. El primer año producen cerca de 10 mil litros de vino tinto, blanco y rose. En 2017 llegaron a producir cerca de 28 mil litros de vino siendo un buen año para ellos. El propósito de esta cooperativa es producir un vino diferente a las otras producidas en la zona, de forma que en su elaboración ha aumentado la variedad de tipo de vino producido.

Sodade Vinho do Fogo

Con la ultima erupción volcánica parte del viñedo se destruyó, teniendo que evacuar 40 mil litros de vinos que tenia ya elaborado, así como todas las maquinarias allí existentes, perdiendo toda la estructura física de la bodega entre las lavas. Los viñedos de esta bodega se empezaron a plantar en 1975, aunque ya existían plantas anteriormente, pero para el consumo alimenticio. Aún conserva cepas de 500 años de antigüedad, pero ya sin producción de frutos.

Los vinos tintos se elaboran tradicionalmente con una fermentación de 15 días en depósitos de acero inoxidable y depósitos de fibra. en Cabo Verde la crianza no se hace en barricas de madera. La segunda fermentación maloláctica se hace alrededor de 6 meses.

  • Bodega Cooperativa CHÁ

Sus primeras producciones datan de 1917, pero son solo de vinos caseros y mosto, no es hasta 1998 con el apoyo de una ONG italiana cuando empiezan a producir vino para la venta al publico embotellada y etiquetada. Anteriormente su producción carecía de técnicas de elaboración, así como de conservación del vino, estos eran almacenados en pequeñas barricas de madera usadas, lo que hacía que se avinagraran.    

El propietario de la bodega, Sr. Andrade, empieza a plantar sus primeras vides en 1984, a día de hoy conserva algunas que se plantaron en 1960, y todavía siguen produciendo.

En 2011, la cooperativa logró superar sus expectativas iniciales llegando a producir 106 mil litros de vinos blanco, rose y tinto. Con la inversión de nuevas maquinarias y tecnología, pudieron aumentar su productividad y obtuvo prácticamente toda la producción de uvas de esa cosecha.

Hacen la fermentación de todos sus vinos en tanques de acero inoxidable de 10 mil litros, así como la crianza de los tintos.

Los viñedos están situados en montañas y laderas a 1730 metros sobre el nivel del mar y algunas incluso a 2000, de allí que la recogida es manual.

Con la formación y ayuda italiana que reciben, siempre están buscando la forma de mejorar sus vinos, llegando a hacer algunos vinos con maceración carbónica.           

  • Bodega María Chaves

Es una bodega construida desde un sueño, el del responsable, el cura italiano Octavio Fassano. Trabaja en una labor social desde hace muchos años en Cabo Verde. El proyecto se inicia en 2005 con la finalidad de promover el desarrollo ocupacional y formación profesional de los agricultores de la zona. La bodega a día de hoy es de la propiedad de las ASDE (Asociación de Solidaridad y Desarrollo Económico). Los beneficios de la bodega van destinados como oxígeno para las actividades de la asociación como el proyecto “mujer y niños” de una localidad de la isla que acogen a las madres jóvenes.

Las viñas de esta bodega fueron plantadas en un terreno con cerca de 36 hectáreas, cedido por el gobierno de Cabo Verde en un plazo de 50 años. Pero solo se puieron plantar 23 hectáreas ya que la cuota del terreno se situaba entre 560 m a 920 m a nivel del mar. Esas viñas fueron traídas de Italia expresamente para su plantación en la isla. Se plantaron mas de 100.000 extensiones de viñedos, muertas en su mayoría en la fase inicial debido a las variaciones climáticas y la falta de agua. Su primera cosecha fue en el año 2012 alcanzando el 50% de la productividad de 2015 y el 100% en 2016.

María Chaves produce vinos blancos, rose y tintos bajo el nombre de las islas:

  • Santa Luzia – blanco seco
  • Sao Vicente – rose
  • Santiago – tinto crianza
  • Sao Felipe – tinto reserva
©Qué Bueno Canarias – Lavinia Cardoso con el equipo del Restaurante Ribera del Río Miño